Un despliegue de movimientos discordantes sobre un escenario gris
La lluvia repiquetea sobre el césped, los árboles y otros cuerpos,
es la música que acompaña los pasos de esta danza asincrónica.
La ausencia de colores se evidencia y la falta de sol lo acrecienta.
Sin embargo la vida resurge en la frescura del agua que cae sin reparo
y un espíritu libre elige este momento para dar rienda suelta a su ser.
La energía lo circunda, lo atraviesa y sigue su camino transformada.
Naturaleza y libertad surgen de las idas y venidas de este húmedo baile.
A lo lejos, en sigilo, los pájaros se guarecen y acurrucan en sus nidos.
Lluvia que purifica y energía que un espíritu atrae y libera.
Rítmicos y cortos movimientos y agua cristalina que los baña.
Gotas que, somnolientas, caen sobre un colchón de silencio.

Muy bueno¡¡
ResponderEliminarGracias!
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